El diálogo será con el argentino Ernesto Yoliztly Lejderman Ávalos, en torno a su testimonio de vida sobre un emblemático caso de desaparición forzada en Chile, con el propósito de realizar una más amplia reflexión sobre la memoria histórica.

La actividad se realizará en el marco de la puesta en marcha del Programa de Derechos Humanos y Ciudadanía de la UTEM, instancia que cuenta con la colaboración del área de Extensión Universitaria de la Universidad.

Ernesto es hijo de Bernardo Mario Lejderman Konujowska y María del Rosario Ávalos Castañeda. Su padre era músico y estudiante de Derecho de origen argentino; su madre, mexicana, estudiante de Sociología y trabajaba de bibliotecaria en la Universidad Autónoma de México (UNAM). Además, ambos eran profesores. Se conocieron en la Ciudad de México y en 1971 se fueron a vivir a Santiago de Chile.

Al momento del golpe de Estado, Bernardo Lejderman era asesor de la Gobernación de Vicuña, en la actual Región de Coquimbo. Luego de una intensa persecución en las zonas precordilleranas, el matrimonio fue asesinado la madrugada del 08 de diciembre de 1973, por una patrulla militar de la dotación del Regimiento Arica de La Serena, en el Valle de Elqui. Ernesto tenía casi dos años de edad y quedó abandonado en la Quebrada de Gualliguaica, en el Valle del Elqui, cerca de la frontera con Argentina.

Hasta el día de hoy su madre permanece desaparecida, mientras que los restos de su padre fueron recuperados en 1990 y enterrados en el cementerio de Vicuña.

Ernesto fue criado por sus abuelos paternos en Argentina y según comentó el diario trasandino “Página 12”, “durante mucho tiempo creyó que sus padres habían muerto en un accidente de tren. A veces de a poco y a veces de golpe fue reconstruyendo su historia (…) Ernesto se enteró que sus padres habían sido asesinados al examinar los cajones de la casa de sus abuelos paternos cuando tenía diez años”. Comentó Ernesto, “mi abuela casi se suicida cuando se enteró lo de mis padres. Con su dolor, se hizo cargo de mí, vivió para mí. Yo en su lugar hubiese hablado de la situación, hubiese ido a un psicólogo. Pero mi abuela desde que tenía doce años trabajó con una máquina de coser, no fue a psicólogos ni tuvo estudios. Hizo lo mejor que pudo”.

El 04 de diciembre de 2000 Ernesto Lejderman presentó una querella en la justicia chilena por el asesinato de sus padres. El caso logró una enorme notoriedad al relevarse que, luego de las ejecuciones sumarias, el niño fue entregado a la Casa de la Providencia de La Serena, a cargo de religiosas, por el entonces teniente Juan Emilio Cheyre, quien llegó 30 años después a Comandante en Jefe del Ejército. Permaneció hasta el 08 de enero de 1974, fecha en que fue sacado para ser llevado a Buenos Aires, a sus abuelos paternos.

En 2013, ambos se enfrentaron en el programa “El Informante” de Televisión Nacional de Chile.

Hoy Ernesto reside en Buenos Aires, Argentina.

Inscripción en el siguiente enlace.

Entrada liberada.